Introduction: El lanzamiento del Altair 8800 y su impacto inicial
En agosto de 1975, el Altair 8800 ya había vendido alrededor de 5.000 unidades, consolidándose rápidamente como el primer ordenador personal accesible para aficionados y entusiastas de la informática. Este equipo supuso un cambio radical en una época donde la computación estaba limitada a grandes empresas que usaban ordenadores voluminosos y costosos. El Altair ofrecía una solución más compacta y competitiva en precio, lo que facilitó la popularización de la informática doméstica.
El contexto tecnológico previo: la era de la microelectrónica
Desde los tiempos posteriores a la Segunda Guerra Mundial, los ordenadores ocupaban habitaciones enteras y su uso estaba reservado a grandes compañías por su elevado coste y complejidad. Sin embargo, la introducción del microprocesador Intel 4004 en 1971 marcó un punto de inflexión, miniaturizando componentes informáticos e iniciando la evolución hacia ordenadores más pequeños y accesibles.
Del Intel 4004 al Intel 8008: avances decisivos
El microprocesador Intel 8008, lanzado en 1974, representó un salto tecnológico importante al ofrecer una arquitectura más eficiente, mayor velocidad y una memoria ampliada, específicamente pensando en ordenadores personales. Estos avances técnicos fueron aprovechados rápidamente por aficionados y desarrolladores para crear sistemas informáticos más manejables y asequibles.
El nacimiento del Altair 8800: la visión de Henry Edward Roberts y MITS
Henry Edward Roberts, al frente de la empresa Micro Instrumentation and Telemetry Systems (MITS), diseñó y fabricó en solo nueve meses el Altair 8800, un ordenador personal basado en el Intel 8008 que ofrecía una CPU de 8 bits funcionando a 2 MHz y 256 bytes de memoria RAM inicial, expandible hasta 64 Kb.
Publicada en la portada de la revista Popular Electronics en enero de 1975, la computadora se vendía como un kit desmontado a 439 dólares o montada por 621 dólares, precios accesibles para ese momento, aunque el montaje era complejo y solo apto para usuarios muy experimentados. El ordenador presentaba un panel frontal con interruptores y diodos LED que permitían la interacción directa con la máquina.
Características técnicas y mercado
El Altair 8800 fue mucho más económico y manejable en comparación con los enormes ordenadores convencionales, sentando las bases para la popularización de los ordenadores personales. Sin embargo, su uso exigía conocimientos técnicos avanzados, por lo que su alcance inicial se limitó a un grupo de expertos y amantes de la electrónica.
El impacto del Altair en el software y la industria informática
Dos jóvenes emprendedores, Bill Gates y Paul Allen, identificaron el potencial del Altair para un público más amplio. Propusieron a Roberts desarrollar un intérprete para el teclado en un lenguaje de programación sencillo: el Altair BASIC. Este software facilitó la programación del Altair, aumentando su utilidad y popularidad.
La colaboración con MITS fue el inicio de Microsoft, que con el Altair BASIC catapultó su crecimiento como compañía, haciendo que Gates abandonara la Universidad de Harvard y Allen su trabajo para dedicarse al desarrollo de software, marcando un antes y un después en la industria informática.
Influencia del Altair 8800 en la creación de Apple y la expansión del PC
Steve Wozniak, inspirado por el kit del Altair, ideó el diseño del Apple I junto a Steve Jobs, que buscaba crear un ordenador personal más sencillo y accesible. En 1976 lanzaron su producto al mercado y comenzaron a consolidar Apple como empresa, que posteriormente desarrollaría el Apple II con teclado, pantalla a color y altavoz.
El movimiento iniciado por el Altair 8800 dio lugar a otros ordenadores personales de la época, como Commodore, IMSAI, Atari y la británica Arcon. Incluso gigantes tecnológicos como IBM se incorporaron a un sector creciente, consolidando el concepto de «personal computer» o PC.
El legado final y la vida de Henry Edward Roberts
Tras el auge del Altair 8800 en 1975, Roberts vendió MITS y abandonó la industria tecnológica para dedicarse a la medicina rural en Georgia, donde ejerció como médico hasta su fallecimiento en 2010 debido a una neumonía prolongada. Su contribución, aunque menos conocida públicamente, fue fundamental para el inicio de la informática personal.
Este legado histórico evidencia cómo el Altair 8800 fue la chispa que encendió la revolución de la informática personal, sentando las bases para la era digital que vivimos hoy.
Imagen: www.abc.es