Resumen de la incidencia en Amazon Web Services
El lunes 20 de octubre de 2025 quedó marcado por una significativa caída en Amazon Web Services (AWS), una de las principales plataformas de servicios en la nube en el mundo. Debido a esta interrupción, miles de webs, aplicaciones y servicios digitales se vieron afectados a nivel global. Este hecho pone en evidencia la elevada dependencia tecnológica mundial, especialmente de las infraestructuras estadounidenses ofrecidas por Amazon, Microsoft y Google.
Origen y alcance del fallo en AWS
Según la propia compañía estadounidense, el problema se originó en una de sus bases de datos principales, DynamoDB, en la región de Virginia. Esto provocó que 82 servicios distintos se vieran afectados, dejando sin acceso a multitud de aplicaciones y sitios web. Josep Albors, experto en ciberseguridad de ESET, explicó que un servidor dejó de comunicarse correctamente con el resto, impidiendo compartir datos clave con las compañías que dependen de estos servicios.
Servicios y empresas impactadas
Entre los servicios afectados destacan las aplicaciones internas de Amazon, su asistente virtual Alexa, plataformas financieras como Banco Santander, BBVA, CaixaBank y Redsys, y grandes marcas como McDonald’s, Ticketmaster y diversas redes sociales como Snapchat y Reddit. También sufrieron interrupciones populares videojuegos como Fortnite, Roblox o Clash Royale, así como herramientas de comunicación y productividad como Slack, Zoom o Canva.
Dependencia mundial de la tecnología en la nube estadounidense
Sancho Lerena, director de Pandora FMS, considera que esta caída no es un incidente aislado, sino un recordatorio sobre la enorme dependencia mundial y europea de la tecnología en la nube gestionada por compañías estadounidenses. La empresa Synergy Research Group estima que estas tres compañías –Amazon, Microsoft y Google– concentran más del 60 % del mercado global de servicios en la nube.
Cuota de mercado y situación en Europa
En detalle, Amazon lidera con cerca del 30 % de cuota de mercado, seguida por Microsoft Azure con un 20 % y Google Cloud con un 13 %. Contrariamente, los proveedores europeos apenas alcanzan un 2 % cada uno en cuota de mercado, con actores como SAP o Deutsche Telekom, seguidos por OVHcloud, Telecom Italia y Orange, que en conjunto apenas superan el 1 %. Lerena apunta que la dominancia de Estados Unidos en esta tecnología es contundente, dificultando la competencia europea.
Riesgos y consecuencias para Europa y el mundo
Esta situación provoca que muchas empresas e instituciones desconozcan el riesgo real que supone depender exclusivamente de proveedores de tecnología extranjeros. Lerena subraya que cualquier problema técnico o incluso un conflicto diplomático podría dejar a numerosas organizaciones «digitalmente muertas» debido a la compleja interconectividad de los servicios en la nube americanos.
Crítica hacia la falta de soberanía tecnológica
Además, el experto lamenta que Europa y otros continentes hayan optado por comprar tecnología de terceros en lugar de desarrollar infraestructura propia. Esto impide establecer medidas de soberanía digital que podrían proteger contra futuras crisis. José Luis Casal, analista digital, coincide en señalar que esta situación limita la autonomía tecnológica y que la concentración en grandes empresas hace muy difícil competir o migrar servicios fuera de estas plataformas.
Impacto de la caída en usuarios y servicios digitales
Los usuarios fueron los primeros en notar las consecuencias, con dificultades para acceder a aplicaciones cotidianas y plataformas conocidas. La aplicación oficial de Amazon, sus servicios de música y vídeo, y el asistente Alexa se vieron momentáneamente inaccesibles. Banqueros y usuarios de banca online experimentaron problemas para realizar pagos y consultas.
En la esfera del ocio, el retraso en la venta de entradas para eventos, como la gira de reencuentro de La Oreja de Van Gogh, evidenció la magnitud del impacto. Desde redes sociales a videojuegos multitudinarios, la caída evidenció cómo la tecnológica AWS sostiene elementos esenciales de la vida digital.
Conclusión: un aviso para la soberanía digital y la diversificación tecnológica
La caída de AWS de octubre 2025 es una llamada de atención global sobre la necesidad de diversificar proveedores tecnológicos y fortalecer la soberanía digital. La concentración en pocas manos puede facilitar servicios ágiles y potentes, pero también genera vulnerabilidad en caso de fallos o conflictos. Europa, en particular, debe reflexionar sobre su posición y buscar alternativas para garantizar la estabilidad y seguridad de sus infraestructuras tecnológicas.
Para consultar más información sobre la caída, puede visitar la fuente original en ABC o revisar el análisis de la cuota mundial de servicios en la nube en Statista.
Imagen: www.abc.es